Beneficios del Taiji Quan

El Taichi, a diferencia de otras actividades cuya finalidad es mover grupos de músculos y articulaciones, requiere además una respiración profunda y regular, mover el diafragma y, más importante todavía, una concentración máxima que beneficia el sistema nervioso y da una buena base para el funcionamiento general de otros sistemas.

Los efectos del Taijiquan (Taichi Chuan) en el cuerpo humano son:

En el sistema nervioso: El sistema nervioso rige y controla todos los demás órganos y sistemas, siendo fundamental para la adaptación a los cambios ambientales y estímulos externos. En la práctica de los movimientos debemos poner toda la atención, concentración e intención en la forma, sin utilizar la fuerza. Los ojos, las manos, la cintura y los pies deben interrelacionarse para formar un conjunto armónico, por lo que desarrollamos el equilibrio y la coordinación. De esta manera el cerebro debe trabajar continuamente fortaleciendo su papel de control y aumentaremos la intensidad del sistema nervioso central. La sensación es de bienestar en todo el cuerpo.

En el sistema cardiovascular y respiratorio: En la práctica se incluyen los diversos grupos de músculos y articulaciones y el movimiento rítmico y regular de la respiración, sobre todo el movimiento del diafragma. Así mejoramos la circulación de la sangre y el sistema linfático. Las contracciones y dilataciones periódicas de los músculos y el ejercicio respiratorio impulsan la circulación de la sangre, y refuerza el proceso de oxigenación; con la respiración además aumenta el volumen del tórax y como consecuencia baja la presión arterial de la caja torácica y mejora la circulación. Al tener una completa relajación de los músculos la respiración se hace de manera natural y se regulariza la circulación de la sangre y de la linfa. La respiración abdominal masajea los órganos internos mejorando su funcionamiento y dejando más espacio al corazón en cada inspiración. Prevenimos así la arteriosclerosis y diversas enfermedades cardiacas.

En el metabolismo: Constituye un práctica motora generalizada ya que posee todos los componentes esenciales y tradicionales de la motricidad humana, produce un aumento del tono muscular, mejora los parámetros de coordinación, favorece el aprendizaje de nuevas habilidades motoras y el perfeccionamiento de las adquiridas, aportando notables ventajas a la hora de ejecutar movimientos complejos.

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